SI DE MÍ DEPENDIERA
Ahí estaba yo, como siempre esa sensación
me embargaba. Ni lo suficientemente alta, ni lo suficientemente lista, ni lo
suficientemente blanca, ni lo suficientemente delgada, ni lo suficientemente
formada, ni lo suficientemente educada, ni lo suficientemente Acaso no soy un ser de este mundo? ¿He
nacido en otro universo y no pertenezco a este planeta? ¿pretendo complicar la
vida a alguien o amenaza mi existencia la vida de las otras personas? ¿Quién
decide la valía de la gente, de los seres de este planeta o de sus
circunstancias? ¿Por qué esa rotundidad al decidir que yo no valgo tanto como
el resto?
Si dependiera de mi, si de mi
dependiera….
¿Quién me dice en ese caso, si
dependiera de mí, que no actuaría de la misma forma que lo hacen ahora las personas
que me rechazan? ¿Quién me dice que yo intentaría rodearme de lo que considero
no diferente, no amenazante? ¿es entonces la ignorancia lo que nos hace
reaccionar con rechazo? ¿ Es acaso la conveniencia y comodidad que adoptamos,
para no tener que esforzarnos en abrir los ojos y observar al diferente? ¿Es
por miedo a tener que adaptarnos y flexibilizar hábitos y costumbres?
¿Acaso no conviven en un mismo
jardín plantas y flores diferentes? Pensaba en las plantas, las más invasoras se
plantan en macetas, para que no acaben "comiéndose" a las más indefensas. ¿Por qué
entonces se actúa al revés? ¿Por qué si eres respetuoso, si pretendes una convivencia
diversa y enriquecedora, no te ganas la simpatía de las plantas invasoras?.
Si dependiera de mí, si de mí
dependiera….
Ya lo tengo, estoy dispuesta, no
hay excusa ni pretexto. Voy a hacerlo, hoy lo intento, me voy a meter muy
dentro. El que piense, la que sienta, los que conmigo no cuentan, con el sitio,
con el mundo, con el planeta iracundo, yo decido, ya no cedo, mi valía igual
que el resto. La que odie, el que rabie, los que no quieran a nadie, es muy
fácil, ahí no hay nadie, la salida está en el balde, sirva un cesto, una
maceta, una tinaja o un tiesto, yo defiendo, igual que el resto, mi lugar sin
aplastar al resto.